La compra de un compresor de aire no es para tomarse a la ligera. Representa un gasto de varios miles de pesos que, aunque se recupera pronto la inversión es más útil si se trata de un equipo de excelente calidad, eficiencia y durabilidad. La idea es que no vuelvas a comprar uno en bastante tiempo.
Su presencia en diversos sectores de la industria resulta muy necesaria pues representa más del 20% de la energía consumida y su aplicación es bastante amplia. Es bien conocido como la herramienta más importante por su capacidad sustentable y es más seguro que las herramientas eléctricas.
Por eso, no hay que subestimar su labor ni sacrificar calidad por costo.
En el mercado existen numerosas empresas que venden y ponen en renta estas máquinas. Puede ser un poco difícil hacer una elección bien pensada, pero será más sencillo y rápido si tienes en mente las siguientes pautas.
Primero define el objetivo de uso
¿Para qué lo vas a usar? No es lo mismo usarlo para pintar, taladrar o cepillar, que para excavar, perforar chimeneas o alimentar martillos neumáticos. Hay tres cosas que debes tener en cuenta porque varían de un modelo a otro:
- Potencia es igual a capacidad de operación, normalmente se mide en caballos de fuerza.
- Presión con la que trabaja.
- Caudal / Volumen, es la cantidad de aire que pueden comprimir.
El costo va a ser más alto conforme los valores de los aspectos anteriores incrementen. Analiza qué tanto le vas a exigir a un compresor de aire industrial con una pregunta: ¿requieres un volumen muy alto de aire? Y entonces sabrás si eliges uno de valores estándar, intermedios o avanzados.
Investiga las marcas
Internet es tu fuente de información, haz una búsqueda de las marcas que venden estos aparatos y recopila datos sobre:
- Valoración de clientes.
- Prestigio nacional o internacional.
- Testimonios de satisfacción.
La idea es que si encuentras empresas con más de cuatro estrellas, renombre y comentarios de clientes satisfechos te enfoques en sus productos y dejes ir a las marcas que se quedaron con calificaciones más bajas y menos reconocimiento de su calidad.
Prioriza la tecnología
Esta maquinaria tiende a sobrecalentarse si no cuenta con una tecnología que regule la energía de acuerdo con la actividad que ejecuta. Lo que provoca un daño en el aceite, mayor consumo de combustible y elevadas temperaturas que dañan al equipo.
Puede seguir funcionando, pero se estará deteriorando desde su interior y no te va a durar el tiempo que quisieras. Una opción para considerar es Airman, ellos tienen tecnología japonesa que evita la pérdida de energía y desgaste innecesario con un regulador de velocidad y descargas del motor.
Elige compresor a diesel
Por las siguientes razones:
- El consumo de combustible será más bajo a comparación del rendimiento.
- Más económico que el eléctrico.
- Son fácilmente transportables a la zona donde van a trabajar.
Busca materiales de fabricación resistentes y disponibilidad de refacciones
Como en general se utilizan para el trabajo rudo, los materiales con los que están fabricados deben ser tolerantes a la humedad y a otros elementos como químicos y polvo.
Además, elige un modelo que continúe en el mercado para asegurar la disponibilidad de refacciones.
Manejo y mantenimiento accesibles
Nada más frustrante que hacer la limpieza de tu equipo y toparte con acabados y diseños difíciles de asear. Entre más simple, mejor. La importancia de la sencillez en la operación y el mantenimiento de un compresor radica en el ahorro de tiempo y energía para el dueño.
El detalle de la garantía
Asegúrate que en la garantía se contemple por lo menos por un año la del generador, el alternador, la unidad compresora y por supuesto la del compresor.
Es de ayuda conocer la referencia de otros clientes, pero la garantía te salvará de quedarte sin apoyo en caso de que la máquina tenga defectos de fabricación en su funcionamiento o estructura.
Ya sabes qué es lo que debes considerar antes de comprar un compresor, no importa el tiempo que tardes en analizar las opciones, tomar la decisión correcta es mejor.