Las flores son bastante misteriosas y engañosas. Si bien, algunas pueden ser comestibles, otras pueden ser extremadamente tóxicas, como la adelfa. Es por ello que debes conocer ¿cuáles son las flores comestibles más comunes?
Ya sea que las cultives o las compres, conocer cómo son estas flores te ayudará a saber en qué alimentos puedes prepararlas.
Aparte, añadir flores a la comida no solo la hace más atractiva, sino que también añade sabores diversos y aporta ciertos matices e incluso nutrientes.
Albahaca
De color blanco o morado, tiene un sabor parecido a la planta, pero más suave. Queda perfecta en ensaladas, en donde aporta un sabor y aroma mediterráneo a nuestros platos. También es muy utilizada para hacer una clásica pizza con albahaca (decorada con flores).
Flor de calabaza
De color amarillo intenso, con un sabor dulce y suave textura. Ya sea fritas, rellenas, en quesadillas y hasta en sopa, son muy utilizadas en la gastronomía mexicana.
Flor de Jazmín
Tienen un perfume intenso y sabor dulce. Normalmente no se comen, sino que se usan como té, o para aromatizar un almíbar. También puede utilizarse para aromatizar postres, helados o cócteles, incluso algún zumo de frutas cítricas, por ejemplo. Por la intensidad de su olor debemos ser cautos a la hora de poner flores, con unas pocas logramos suficiente fragancia. Si te gustan las emociones fuertes prueba a darle sabor poniendo una sola flor en un vaso de Vodka.
Flor de Azahar
El azahar proviene de la flor del naranjo amargo y se utilizó desde siempre como relajante y para calmar los nervios en forma de infusión. De color blanco y con cinco pétalos, es extremadamente aromática. Se utiliza principalmente para extraer el agua de azahar y para aromatizar panes y bollería.
Violeta (Viola odorata)
Algunas variedades de Viola odorata aportan una dulzura inigualable a postres, ensaladas de frutas y tés. Estas flores poseen un dulce aroma y pétalos de color púrpura oscuro o blanco. Por ello se utiliza para la elaboración del jarabe púrpura en Francia. Este jarabe se utiliza en repostería, para hacer bollos o también malvaviscos. El extracto de la flor morada está disponible para usos culinarios, siendo de gran valor económico.