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Joanne Milne es una mujer que desde el día que nacio se encontró que era sorda, debido a que sufre del síndrome de Usher, que es un raro trastorno genético asociado a una mutación que causa sordoceguera congénita y puede ser heredado.
Milne actualmente cuenta con 40 años, pero a los 20 comenzó a perder la visión y gracias a los avances de la ciencia después de este tiempo, la chica ha logrado escuchar la voz de su madre.
Este logro fue gracias a los médicos del hospital Queen Elisabeth de Birmingham, donde le han puesto unos implantes coclares y con los cuales logró identificar los sonidos por primera vez.
Su reacción ha sido sorprendente y nos invita a la reflexión… porque además de poder escuchar las voces de los demás, es la primera vez que puede escuchar su propia voz, logro que ha cambiado completamente su vida.