El cáncer es una enfermedad a la que nadie quiere hacer frente, sin embargo, cuando es diagnosticado a tiempo, las probabilidades de sanar son mayores. Por ese motivo siempre debemos estar atentos a los primeros síntomas para recibir atención y tratamiento adecuado.
Para llegar al diagnóstico correcto es necesario hacer una serie de exámenes, ya que incluso muchos de los síntomas mencionados pueden significar otras enfermedades. Pero la siguiente guía puede ayudarte a determinar si te encuentras en una fase temprana de Cáncer.
Normalmente el cáncer se diagnostica cuando el paciente reporta síntomas que surgen de la noche a la mañana y que su intensidad ha pasado de menos a más en apenas unos días. Por ese motivo prestar atención a estos detalles te ayudará a detectar esta enfermedad de forma temprana.
Cambios en el color de piel. Desde un nuevo lunar o el surgimiento de una mancha que crece en tu piel puede ser un riesgo, sobre todo si cambia de tamaño ya indicaría que necesitas una revisión médica.
Perdida de peso. Perder peso de forma muy rápida y sin hacer dieta podría ser una alerta importante. Normalmente los primeros síntomas de cáncer muestran que las personas pueden perder hasta el 10% del peso en apenas unas semanas, a pesar de continuar comiendo las mismas porciones.
Cansancio intenso. Una fatiga intensa, a pesar de no hacer nada, o realizar actividades muy básicas, como subir escaleras, podrían también ser una señal de alerta.
Sangrados y lenta cicatrización. En una etapa temprana podría significar síntomas de cáncer en alguna parte de tu cuerpo, así como cicatrices que tardan más de un mes en sanar.
Recuerda, el cáncer surge principalmente por alguna alteración en el crecimiento desordenado de las células de tu cuerpo y terminan «alimentándose» con los recursos del cuerpo, las células cancerígenas, e incluso las células podrían liberar sustancias al torrente sanguíneo que alteren la circulación de la sangre.
Por ese motivo, un estilo de vida saludable te ayudará a prevenir el surgimiento de esta enfermedad. Empezando por practicar ejercicio diariamente y comer balanceadamente.