¿Alguna vez te has imaginado una perfecta utopía con recursos inagotables? Pues… En 1968, el doctor John Calhoum creó el Universo 25.
John Calhoum fue un etólogo e investigador que pasó años estudiando el comportamiento de los ratones mientras trabajó para el NIMH (National Institute of Mental Health) experimentando con los efectos de una superpoblación de roedores a través de mundos artificiales a los que denominaba Universos utópicos.
El Universo 25 fue probablemente el más famoso, tanto por su infraestructura como por sus terribles resultados.
¿En qué consistía el Universo 25?
En 1968 el doctor John Calhoum colocó 8 ratones en una especie de caja de no más de siete metros cuadrados en total.
Era un verdadero paraíso para los roedores. Tenía acceso ilimitado a la comida y agua, así como al material para la construcción de nidos. Cada semana se limpiaba el lugar y se tomaban todas las medidas de seguridad necesarias para que los roedores se sintieran bien.
El experimento había iniciado con cuatro parejas de ratones libres de enfermedades, cuatro machos y cuatro hembras. A los 104 días de comenzar los ratones comenzaron a procrear. Pasados los 300 días, los ratones ya habían llegado a la cifra de 600 roedores en el hábitat.
Todo iba marchando bien, hasta que, para el día 560 del experimento, la población de roedores ya había llegado a 2.200. Fue en este punto cuando la población comenzó a decrecer.
https://youtu.be/0Z760XNy4VM
En esos momentos las situaciones entre los roedores se tornaban cada vez más violentas. Los ratones se atacaban unos a otros, el territorio que comenzó con “grandes” espacios para unos pocos se había convertido en un espacio claustrofóbico. Gradualmente la utopía se había convertido en una distopía.
El paralelismo con los humanos
En 1970, John Calhoun publicó su investigación sobre Universe 25 bajo el título Death Squared: The Explosive Growth and Demise of a Mouse Population. En dicha investigación, Calhoun menciona que hablará «en gran medida de ratones, pero mis pensamientos están en el hombre».
Lo que nos sugiere que el investigador buscaba entender estos comportamientos y tendencias; no tanto en ratones, sino principalmente en sociedades humanas.
En futuros experimentos quiso encontrar también la solución al problema. Sin embargo, nunca llegó a mantener una utopía permanente.
En esencia, su teoría del behavioral sink explica cómo se puede dar un colapso en el comportamiento de los individuos en sociedad, así como el cambio del mismo debido a la superpoblación.